Tener relaciones sanas no es sencillo, entre otras cosas porque nadie nos ha enseñado y porque nuestra pareja nos refleja lo que no hemos sanado en nosotros y lo que no queremos ver. No hay nada fuera que no está dentro. Esto nos da la oportunidad de mirar que es lo que vemos fuera y sanarlo dentro de nosotros.
Usamos diferentes técnicas para tomar consciencia de los temas sin sanar y enseñamos herramientas que nos ayudan a resolverlos. Estas herramientas o técnicas son fáciles y efectivas, y se pueden usar en los momentos necesarios. De hecho es la practica que hace la maestría.
Nuestras relaciones se basan en el modelo de nuestros padres y de quienes nos educaron. Haremos un estudio de estos modelos y transformaremos las relaciones a un nuevo nivel de comunicación y compartición consciente y amorosa.